2016-02-172014http://hdl.handle.net/10784/8026Este documento incluye un texto que responde la pregunta planteada en el título, un mapa de contenidos y una guía metodológica para la realización de un taller. Para iniciar el texto explica que la tierra conserva una gran cantidad de energía en su interior, más concretamente energía calórica. Esta energía proviene principalmente de los residuos que quedaron de la formación del sistema solar y del planeta mismo, antes una bola incandescente de fuego que por su tamaño pequeño comenzó a enfriarse. El planeta libera la energía que contiene a través de las erupciones de los volcanes, de las fuentes geotérmicas superficiales y de los temblores y terremotos. Para explicar los últimos, es importante apuntar que el material al interior de la tierra está en constante movimiento, se calienta y se expande. Las corrientes de convección son aquellos movimientos ascendentes y descendentes de las capas al pasar de frío a caliente y viceversa. La predicción de los movimientos es esencial pues puede ayudar a evitar daños, al indicar cómo se debe diseñar obras de infraestructura que resistan. Para predecir, se debe estudiar las fallas, las características de la corteza, la geometría de la superficie, pero sobre todo cómo estos factores afectan los movimientos que se dan en la superficie de la tierra. Las modelaciones físico-matemáticas y la simulación computacional son las herramientas necesarias para realizar este tipo de predicciones. Se utiliza el método inverso, en el cual se estudian los sismos ocurridos para afinar los datos de las fallas y la corteza, un método de ensayo y de error hasta que la predicción sea perfecta.spaUniversidad de los niños EAFITEnergíaTierraTembloresPredicciónMovimientosinfo:eu-repo/semantics/workingPaperinfo:eu-repo/semantics/closedAccessAcceso cerrado2016-02-17Abad Restrepo, Ana CristinaJaramillo Fernández, Juan DiegoHenao Toro, MauricioMuriel Gil, Luisa Fernanda .