2020-06-1119990120-341Xhttp://hdl.handle.net/10784/16351Está demostrado filogenéticamente que el hombre evoluciona de una manera tan rápida que los mecanismos de comunicación por ejemplo, reflejan, a su paso, las condiciones de modificación. El aparato fonoarticulatorio se transformó de tal manera cuando el hombre tomó la posición erguida que la glotis disminuyó el tamaño, las cuerdas vocales se templaron y se dividieron en dos (falsas y verdaderas) y los puntos articulatorios se afinaron tanto que hasta la cavidad dental se filó, provocando con esto la necesidad de hacer cosas con ese aparato articulatorios tan fino. Esas cosas podían ser palabras, onomatopeyas, tanteos, silbidos, gruñidos, bostezos, sonrisas, gritos, manías, etc.application/pdfspaCopyright © 1999 Sonia LópezFin de milenio o fin del lenguaje verbalarticleinfo:eu-repo/semantics/openAccessFilosofía del LenguajeTrastornos del LenguajeLenguaje y CulturaAcceso abierto2020-06-11Lopez, Sonia