Este primer volumen comprende, pues, la descripción y estudio de las costas colombianas sobre el mar de las Antillas, y para completarlo, hasta donde sea posible, se incluyen muy importantes documentos todos inéditos. A Fidalgo sigue un documento, de no menos importancia, á saber : "La exploración de las playas de la costa norte de la antigua Provincia de Veraguas," verificada por el sargento retirado Manuel de Jesús Atencio. Esta relación sirve para demostrar la jurisdicción que ejercieron los Gobernadores de la Provincia de Veraguas sobre todo el territorio del Istmo hasta el río de las Culebras, y el territorio ocupado por los indios Doraces y Guaimíes, incluyendo todo el litoral de la bahía del Almirante y Bocas del Toro, que hoy disputa á Colombia la vecina República de Costa-Rica. Igualmente contiene datos preciosos para fijar la geografía de aquella región, sobre la cual tantos errores y tan variadas equivocaciones cometen los abogados y escritores de aquel país ; sirviendo, además, para demostrar que los misioneros de Santiago de Alanje y San Francisco de la Montaña hacían entradas de tiempo atrás á aquellas regiones, que eran bañadas por varios ríos, como el Chiriquí y el Calavebora, cuya situación se puede identificar por esta relación y un croquis publicado en las "Décadas de Indias" de Herrera. Los demás documentos contenidos en este volumen, que confiamos á la benevolencia de los americanistas, son de importancia no menor ayudando también al conocimiento de nuestras costas y á asegurar el dominio de ellas en el Atlántico hasta el río Dorado ó de las Culebras y llevar nuestra jurisdicción sobre la Costa de los Mosquitos hasta el cabo Gracias á Dios